Estás a 5 respuestas de saber qué rumbo va a tomar la editorial. A lo largo de las próximas 5 semanas seguiré con el desnudo integral de nuestra empresa. Creo que he dado con un modelo de negocio distinto a cualquier otro. Si quieres saber de qué va, ya sabes lo que tienes que hacer.
No quiero.
Rotundamente no.
¿A estas alturas de la película voy a imprimir más? ¿Para qué? ¿Para participar en el perverso ciclo al que el sector está condenando al libro?
Si volvemos al contexto que te comentaba el otro día sobre la transmisión del conocimiento en esta era, pensar en publicar más, imprimir más y saturar los puntos de venta con novedades inabarcables es tan absurdo como hubiera sido en su momento insistir en copiar los manuscritos a mano cuando ya disponíamos de la imprenta.
Te voy a contar algo que me ocurrió este verano y que hizo que descartara del todo la posibilidad de imprimir más.
Pasé las vacaciones en Burguete, el pueblo de mi madre. Como cada año, uno de los días subimos al monte para ver la tala de árboles. El Ayuntamiento adjudica una tierra concreta a cada familia para que tengamos leña durante el invierno.
Ver esos enormes árboles cayendo despacio y chocando contra la tierra con un ruido sordo, me puso los pelos de punta. Me dolió.
Esos organismos tan preciosos que han dedicado meses o años a aumentar el volumen de sus tejidos, que han dado cobijo a insectos, pájaros y pequeños mamíferos, que han absorbido el dióxido de carbono haciendo que nuestra respiración sea tan agradable como beber un vaso de agua fría con sed…
Esas maravillas de la naturaleza caen sobre la tierra para que despiecemos sus troncos y sintamos calor cuando bajen las temperaturas.
Todo me resultó impresionantemente bonito, como si formara parte de un ciclo perfecto.
Pero, de pronto, pensé en los árboles que talamos para hacer libros que terminan en destructoras y me puse malo.
Malo de verdad.
Malo como para arrepentirme de dedicarme a esto.
Así que, como supondrás, no me sentiría nada orgulloso de aumentar mi producción sin tener la garantía de que TODOS Y CADA UNO de nuestros libros van a acabar sobre el regazo de alguien.
Prefiero que sea nuestra competencia la que asuma esa incomodidad.
Y pensando en la competencia, me surge otra pregunta:
¿Necesita el mercado una editorial como Next Door?
Esto te lo contesto (con toda la honestidad del mundo) el próximo martes 8 de octubre.
Hasta entonces, un abrazo.
Oihan
Si quieres tener a mano la fotografía completa del análisis que estoy haciendo, aquí:
→ Las 10 preguntas que debo responder
#1 ¿Me equivoqué renunciando a los 15.000€ anuales que nos daba la tienda on line?
#2 ¿Por qué no han respondido las librerías?
#3 ¿Estoy dispuesto a publicar más con tal de conseguir mayor penetración en el mercado?
Buenas noches, Oihan.
No me he puesto mala leyendo tu relato, pero si triste, muy triste.
Un cordial abrazo, de una madre.
Ay. Estoy deseando saber en qué para todo esto. Entiendo tus reflexiones. Pero espero que acabe bien. Eres muy necesario.