Truco con el que convencí a mi colega de que la homeopatía no funciona
Vale, os he mentido, no fue a un colega sino a mi prima.
Lo primero que te recomiendo es que NO DISCUTAS SOBRE EL TEMA. Deja de intentar convencer a quien sea que estés intentando convencer.
No funciona.
Seguro que te da mucha rabia que alguien de tu familia te diga que estás equivocado. Ya solo por eso, descartas su opinión.
A mi prima le daba mucha rabia que yo le dijera que estaba equivocada.
—¡Qué no! Que a tus hijos la homeopatía no les está evitando la gripe.
—Déjame ya de una vez, plomo.
Tratar de demostrar la no existencia de algo a alguien que tiene fe es absurdo. Porque es cuestión de eso: fe.
Hay que hacer otra cosa más inteligente. Y que a la larga te va a evitar discusiones estériles en la mesa. Y, de paso, dejarás de amargar al resto de la familia (la mía estaba harta).
¿Verdad que cuando un amigo al que respetamos nos recomienda un libro solemos hacerle caso? Pues eso es precisamente lo que hice yo. Hablar con una de sus amigas, una a la que tiene en muy alta consideración, y pedirle que, por favor, le regalara a mi prima un libro.
Por supuesto, elegí a una amiga con la que ella nunca hubiera discutido sobre la homeopatía. Y que no tuviera un perfil demasiado escéptico.
El libro que le pasé para que, a su vez, se lo regalara a mi prima (sin decirle nada de todo esto, por supuesto) fue el siguiente:
Un científico en el País de las Maravillas. El libro
Se lo regaló y mi prima dejó de utilizar la homeopatía.
Esto solo funcionó porque me salté el sesgo que tenemos todos con nuestra familia. Que, por cierto, ese es otro tema a revisarnos. Ellos y nosotros.
Feliz fin de semana.
Oihan