Una de las virtudes que más admiro es la capacidad de ser justo. Creo que es algo realmente complicado.
En principio, para lograrlo deberíamos tener el don de juzgar de forma objetiva. Perales dice que la objetividad absoluta no existe, pero menciona una herramienta que casi nadie pone en práctica y que, sin embargo, puede ayudarnos en el proceso.
“Dudar de ti mismo”.
Yo dudo constantemente de mí mismo y aunque eso me ha traído algunos problemas a la hora de poner límites claros, sí me ha permitido acercarme a posiciones que a priori estaban muy alejadas de la mía.
“El debate y la divergencia son la mejor herramienta en la búsqueda de la objetividad”·
No puedo estar más de acuerdo, siempre y cuando ese debate no se vea atravesado por una herida personal.
¿Puedo yo debatir con alguien sobre el origen de la adicción? Puedo, pero es posible que en algún momento un comentario del tipo “a mí me parece que es un vicio” haga que me sienta juzgado.
En ese punto, dejaré de defender una idea para defender mi propio honor.
Y ahí se acabará toda posibilidad de objetividad. Perales lo explica así:
🎁 La escritura a cuatro manos de Trampas me enseñó dos cosas sobre el proceso de creación de una obra divulgativa.
La primera, que el objetivo de la divulgación no es propagar tus ideas, sino presentar la realidad de la forma más transparente posible, sin que eso esté reñido con que la lectura sea a la vez amena y divertida.
Aunque la objetividad absoluta no exista, su búsqueda te obliga a dudar de ti mismo, y a elegir las palabras y describir los hechos con extremo cuidado, especialmente en un terreno tan resbaladizo y en el que se cruzan tantos intereses (no siempre confesados) como el del juego de azar.
La segunda, muy relacionada con la primera, es que escribir un libro de estas características con un amigo requiere un enorme nivel de compromiso, de escucha mutua y de negociación, en el mejor sentido de estas palabras.
El debate y la divergencia son la mejor herramienta en la búsqueda de la objetividad.
Navas y Perales han escrito una obra en la que la búsqueda de objetividad, de rigor, de compromiso y de honestidad están presentes de principio a fin.
Donde no hay lugar para las trampas ni la manipulación. Donde la psicología del juego de azar se muestra tal y como es.
Te lo pongo fácil.
Un abrazo,
Oihan
PD: Aquí te dejo la entrevista que les hice.
“Leí Trampas y es fascinante cómo conecta escenas de películas con teorías psicológicas sobre el juego. Un libro imprescindible para quienes aman el cine y la psicología”.
@CineYPsicología
“Trampas me abrió los ojos sobre cómo los juegos de azar están diseñados para enganchar. Además, me encantó cómo usa ejemplos de películas para explicar conceptos complejos”.
@PsicoLecturas
“Recomiendo Trampas a todos los que quieren entender el lado psicológico del juego. Los autores lo explican de forma clara y entretenida usando ejemplos del cine”.
@AdicciónYSociedad
“Guiándose de películas y series los autores trasladan los riesgos detrás de cualquier apuesta, por pequeña que sea”.
Diario de Burgos
Este email forma parte de una serie. En ella los y las autoras te van a dar algunas claves. 46 libros que se convertirán en 46 lecciones durante 46 días.
Si conoces a alguien que quiera aprender a escribir y vender divulgación científica ciencia, ya sabes…